domingo, 30 de octubre de 2016

Descubriendo M15: William Herschel

Tiempo de lectura: 5 min.
William Herschel

El reloj marcaba las 16 h de un día caluroso del mes de junio del año del señor  1782  en la Real Sociedad de Londres, y como era habitual William Herschel  tomaba su té de manera distendida con sus colegas. Ya era un astrónomo archiconocido y ostentaba el título de Astrónomo Real de la Corte. El descubrimiento del nuevo planeta Jorge (Urano), fue gracias a  la fabricación  de un gran telescopio que el mismo habría construido.

Su amigo William Watson, esa misma tarde le regaló un Catálogo de un tal Messier. Su lectura  estimuló el interés de Herschel por las nebulosas y los cúmulos, llamados en conjunto  lo que actualmente denominamos "objetos de espacio profundo". En el mes de agosto de 1782, Herschel comenzó a investigar los objetos descritos en el libro con sus telescopios, más poderosos que los que el propio Charles Messier, autor del Catálogo, jamás poseyó. Para septiembre, se había convencido de que el libro sólo contenía una ínfima parte de los objetos de espacio profundo existentes en la realidad, por lo que decidió dedicarse a una minuciosa, extensa y sistemática búsqueda en todas las partes del cielo visible desde su observatorio. El proceso empezó el 23 de octubre de 1783, con la ayuda de su hermana  Caroline y utilizando su refractor de 157 aumentos y campo de 15' y 4" de arco.

Telescopio de 12 metros construido por William. 
Al año siguiente le toco observar con su reflector de 18 pulgadas el objeto del Catalogo M15 que el mismo Messier describió como  un objeto de “Nebulosa sin estrellas”. Sin embargo, cuando apunto con su potente telescopio pudo discernir y comprobar rápidamente que la nebulosa en realidad era un cúmulo formada  por miles de estrellas que se apiñaban hacia un núcleo irresoluble.

La vida de William fue plena de descubrimientos y en apenas 20 años descubrió más de 2.000 objetos del cielo profundo (nebulosas, galaxias, cúmulos), trayectoria que su hijo John Herschel continuo a su muerte.

Curiosamente, en 1801 Herschel viajó a París, donde se reunió con los renombrados científicos franceses Pierre Simon Laplace y el ya anciano Messier. Enterado Napoleón de la presencia de estas tres celebridades reunidas, los recibió en su despacho oficial y pasó con ellos largas horas interesándose por sus descubrimientos. En 1806 Napoleón le impuso la Cruz de la Legión de Honor. William Herschel pasó a la historia como el descubridor del planeta Urano, murió el 25 de agosto de 1822 a la edad avanzada de 84 años, los mismo que los que tarda el planeta en dar su periodo orbital.
Asterimo de la constelación de Pegaso

M15 está a unos 33 600 años luz de la Tierra, y 175 años luz de diámetro en la constelación de Pegaso. Tiene una magnitud absoluta de -9,2, (es decir, la luminosidad que tendría este objeto a una distancia de 32 años luz o 10 parsecs) que se traduce en un total de luminosidad unos 360.000 veces mayor a la del Sol.  Las estrellas de M15, como pequeñas abejas, se apelotonan alrededor del núcleo brillante formando un conjunto de más de 100 000 estrellas, por lo que es uno de los cúmulos más densos conocidos. En el interior del mismo se sospecha la existencia de un agujero negro, además de contener estrellas variables, pulsars, estrellas dobles e incluso una nebulosa planetaria  Pease 1 (o Kustner 648) visibles con telescopios de mayor apertura.

A nivel observacional M15 es un objeto fascinante, si tuviera que definirlo con palabras emplearía “electrizante” “sutil y misterioso”. Su observación requiere de apertura generosa, aunque es fácilmente observable con binoculares. A bajos aumentos se aprecia una nube algodonosa muy compacta. A medida que forzamos los aumentos se distinguen perfectamente ya las estrellas de la periferia, y con algunos minutos de adaptación a la oscuridad y visión periférica  “destellan” algunas estrellas del núcleo, irresoluble  con estas aperturas.
Dibujo de M15 a 166x

Cuando  observo objetos me doy cuenta de lo ínfimo que somos, pero de la misma manera estoy en comunión con el cosmos, y tengo la sensación de que formamos parte de él. Estoy seguro, que esta sensación la tuvo William Herschel a lo largo de toda su vida, a la que dedico plenamente a la observación del universo.

domingo, 9 de octubre de 2016

Messier 38


Tiempo de lectura: 3 min.

Revisando dibujos guardados en mi diario de campo, me he encontrado con este dibujo que hice hace casi un año del cúmulo abierto Messier 38. Como es habitual y recomendable, siempre dejo notas al pie del dibujo donde reflejar no solo datos del objeto en sí, condiciones atmosféricas si no además, sensaciones. Al fin y al cabo la astronomía amateur no deja de ser un hobby con el que aprender y disfrutar al mismo tiempo. Una de las cosas que deje anotado, era precisamente que a pesar de ser el cumulo de mayor debilidad de los que se encuentra en la constelación de Auriga, era a mi juicio uno de los que más me gusto (con permiso de M37).


En la constelación del Cochero o Auriga,  se encuentran tres magníficos cúmulos, M36, M37 (ver aquí entrada) y M38. Este último, a pesar de ser el más débil de los tres (magnitud aparente de 7.4), es fácilmente localizable. La constelación tiene forma de pentágono,  y se encuentra casi en el centro del mismo. Para localizarlo, es necesario localizar la estrella Capella y unir mediante una línea imaginaria con la estrella de El Nath, y a mitad del recorrido nos encontraremos de lleno con  M38.

Fue descubierto por Giovanni Batista Hodierna antes de 1654 e independientemente encontrado por Le Gentilen hacia el 1749. Messier lo incorporaría en su catalogo el 25 de septiembre de 1764. M38 está a una distancia de unos 4.200 años luz desde la tierra y se estima de una vida de apenas unos 200 millones de años, por tanto, aun es considerado hogar de jóvenes estrellas. La gravedad aun los mantiene fielmente juntas, pero en apenas algunos millones de años, estas vagaran independientemente por el espacio.

M38 ocupa un espacio de al menos 25 años luz y agrupa al menos 100 soles. Su observación con unos binoculares es recomendable, y con telescopios de ya 8 pulgadas (200 mm) se aconseja con oculares de bajos  y medios aumentos. La mayor parte de sus componentes son de magnitud 9 y 10, a excepción de las estrellas más centrales del dibujo que forman un rectángulo.

Otra características que me llamo la atención, fue el color blanco azulado de las principales, que asociadas con las más débiles  constituían una peculiar forma serpenteante de enorme belleza.

Dibujo M38. 15/11/15


Los meses de noviembre y diciembre son ideales para observar esta maravillosa constelación, y sin duda, no perderse de apuntar vuestros telescopios a Messier 38.

domingo, 2 de octubre de 2016

La pequeña Dumbbell ( M76)



Tiempo de lectura 4 min.

En la mitológica constelación de Perseo nos encontramos con uno de los objetos más delicado de esta zona del cielo. En la frontera con la constelación de Andrómeda nos encontramos con Messier 76 o más conocida como la “pequeña Dumbbell “.


Curiosamente el origen de Perseo o más bien, el halo de nacimiento de este personaje contrasta con la naturaleza del objeto. Como ya adelante en otra entrada, Perseo era hijo de Zeus y de la mortal Da­nae. Fue uno de los heroicos semidioses de la mitología griega junto a Heracles y Teseo, llevando a cabo numerosas tareas sobrenaturales.

Acrisio, rey de Argos y padre de Dánae, la había encerrado en una torre de bronce para evitar que ella concibiese un hijo, ya que un oráculo le había asegurado que su nieto lo mataría. Zeus, que deseaba a Dánae, rechazó dejar este castigo así. Visitó a Dánae en forma de lluvia de oro, de la cual nació Perseo. En torno a esta intrigante historias de amores y desencuentros, oráculos, intrigas y misterios, batallas y muerte se encuentra nuestro objeto. Messier 76 realmente es una nebulosa planetaria, que como todos sabemos, es el resultado de la agonía mortal de una estrella. Si todos queréis cual será el fin de nuestro sol y sistema solar, solo tenemos que contemplar este objeto, ya que la estrella que alguna vez fue esta nebulosa, es como nuestro sol en tamaño y características y todo apunta que nuestro sol terminara de la misma manera.

Otra de las curiosidades de esta nebulosa es que esa imagen alada y misteriosa que ofrece a pie de ocular, ya no será visible en cuestión de 2.000 años, solo quedando el reflejo de una estrella de baja magnitud. Si en el 4.016 aun existe humanidad, no podrán gozar de este espectáculo, o quizás el ser humano si hay esperanza habrá alcanzado otras estrellas y sistemas planetarios, sin embargo todo son especulaciones y suposiciones como si de un oráculo se tratara.



Dibujo M76
Respecto a M76 comentar es un objeto que dista de nosotros a 3.400 años luz. Su descubrimiento se realiza el 5 de septiembre de1780 por Pierre Méchain, este a su vez informó a Charles Messier quien determinó su posición y la añadió a su catálogo.

Es un objeto pequeño, que requiere de una cierta calidad de cielo (a ser posible observar en luna nueva y fuera de zonas de contaminación lumínica). Su imagen recuerda a la famosa nebulosa planetaria Dumbell, de ahí su nombre. Es extremadamente pequeña en tamaño pero su centro es bien visible y con un telescopio con una apertura de 8 pulgadas ya se distinguen las dos alas que se desprenden de su centro, creando la forma de un reloj de arena. Esta rodeado de una gran cantidad de estrellas de baja magnitud, provocando que M76 resalte como un objeto vaporoso, débil pero delicado, y la sensación de flotar en el cielo.


Las nebulosas planetarias son en definitiva oráculos, que nos recuerdan y presagian el futuro, en ellos nos vemos reflejados, nuestra existencia y en definitiva, nuestro devenir.