sábado, 21 de noviembre de 2015

La creación de un Semidios:M34

Tiempo de lectura: 5 minutos


Perseo es una hermosa constelación que podemos observar en nuestras latitudes en otoño e invierno hacia el noreste. En la mitología de la antigua Grecia se refiere al heroico semidiós, hijo de Zeus y la mortal Danae. Su vida está plagada de numerosas hechos sobrenaturales. Es famoso por que venció a la temida Medusa que convertía en piedra al todo aquel que osaba mirarla directamente. También se convirtió en mito por salvar a la hermosa Andrómeda, hija de Cefeo, de la cual relate  en una entrada anterior. Perseo pasa al imaginario colectivo y celestial por todas las proezas de su viaje mítico.



Perseo se elevo a los cielos en forma de héroe, pero además, es una constelación que encierra números y bellos objetos para observar. A nivel galáctico, Perseo es una de las espirales más cercanas y principales de nuestra galaxia. Alberga dos sus dos estrellas principales fácilmente observables a simple vista. En el centro de la constelación podemos observar su estrella principal, Mirfak o Mirphak ( Alpha Persei). Se trata de una supergigante blanco-amarillenta de primera magnitud, 62 veces mayor que el sol, a tan solo 600 años luz nosotros.

Su segunda estrella principal es Algol o estrella del diablo. En el mundo de la astronomía esta estrella es muy importante, que me gustaría tratar profundamente en otra entrada, es una estrella binaria, esto significa que tiene una compañera  que eclipsa a la principal, haciendo  que su brilla fluctúe hasta perder un 70 % de su brillo en un ciclo exacto que dura 68 horas y 49 minutos.


En Perseo, también se encuentra Messier 34, que me llevo a observarla la noche del 10 de noviembre de 2015. Esa noche la recuerdo con un nivel de humedad tan alta, que tras realizar el dibujo tuve que recoger porque se empapaba la lente del  telescopio. Es un bello cumulo abierto a 1.400 años luz y fácilmente distinguible con unos prismáticos y pequeños telescopios. En mi libro de registro anoto lo siguiente:

Bonito cúmulo, juego con el ocular Zoom Hyperion, y me siento cómodo con la focal de 20 mm. Destacan las dos estrellas principales del centro, junto las que están en la parte inferior. Las dos de arriba parece ser una bella doble. Tiene forma de cometa, con una hilera de estrellas débiles que me recuerdan la cola. El conjunto parece estar rodeado por una tenue nebulosa, quizás el gas  que les dio la existencia. La noche es clara, pero la humedad empapa el papel y me obliga a terminar la observación. Observo más de 50 componentes, pero en un lugar oscuro debe ganar en belleza”.

Dibujo realizado M34
Quizás aun quede un poco de Medusa en la constelación, porque  por un instante me quede de piedra al contemplar su belleza.



domingo, 8 de noviembre de 2015

Messier 76: La pequeña Dumbbell

Tiempo de lectura 4 min.
Messier 76


La noche del 5 de septiembre de 1780, el astrónomo frances Pierre Méchain preparo el telescopio, su blog de notas y sus cartas celestes , para catalogar y explorar la zona de cielo que se encuentra entre Perseo, Casiopea y Andromeda. De repente por su ocular encontró un objeto fantasmagórico, miro de nuevo las cartas y se sorprendió que allí no hubiera nada, acababa de descubrir NGC 650 o Messier 76!!!. En su bloc de notas anoto que era una nebulosa sin estrellas, y paso las coordenadas a Charles Messier para que lo comprobara, quien la clasifico como una nebulosa, pero en este caso compuestas por débiles estrellas. No fue hasta 1918 cuando finalmente Herber Curtis determino la verdadera naturaleza de M76, la de una nebulosa planetaria, o en términos mas sencillos, la de una estrella moribunda que expulsa al espacio sus gases formando en su ultimas fases.

Como anecdota en este recorrido historico del descubrimiento, es que M76, por su apariencia, se penso que era doble, y fue catalogado como tal. En realidad, es una unica nebulosa con forma de reloj de area y alas que la rodean dando esa sensacion de dualidad. Es uno de los objetos mas debiles del Catalogo Messier, por ello se aconseja observarla en cielos libres de contaminacion luminica y de luna. Su distancia es de 3.400 años luz y se estima que su longitud es de 1 año luz.

En la madrugada del 6 de noviembre, y con un buen cielo, aunque con cierta humedad en el ambiente, me dispuse a localizarla, el Goto del telescopio de 202 mm de diámetro me llevo hacia ella. En el ocular aparecía una nube blanca-azulada fantasmagórica, rodeada por un conjunto de estrellas de poca magnitud que generaban un conjunto sugerente. Me sorprendió poder observarla directamente, a pesar de ser un objeto de baja magnitud, ayudo que en esa parte del cielo casi no tengo luces o poblaciones importantes. Al cabo de 5-10 minutos, el proceso de adaptación del ojo a la oscuridad, me permitió ganar algunas magnitudes, y vislumbrar ahora si, con claridad,  esa forma de reloj de arena que la caracteriza y  sus dos alas desplegadas.

Rápidamente cogí el cuaderno, lápiz,difumino y con la tenue luz roja me dispuse a dibujar este magnifico objeto, que recuerda a la que recibe de nombre de su hermana mayor, la Dumbbell.
Dibujo de M76

Es curioso, pero en ese momento, mientras anotaba mis impresiones y realizaba el dibujo olvide todo dato técnico y me impregno una sensación extraña, de estar observando algo desconocido en su naturaleza, quizás y por un instante pude sentir lo que Pierre Méchain sintió esa noche del 5 de septiembre de 1780 al descubrir algo desconocido. Es la magia de la astronomía.